Reproducir vídeo

A día de hoy, no hay ningún estudio científico que ni siquiera dé a entender que el agua con limón tenga más beneficios para la pérdida de peso que el agua sola. Ninguno!

Ni con agua fría ni con agua tibia, ni con el zumo de medio limón ni con 10 gotas de zumo de limón, ni en ayunas ni antes del almuerzo. Nada de nada.

Si bien es cierto que el limón contiene una fibra (pectina) que puede ayudar a reducir el apetito y, por lo tanto, la ingesta de calorías, la cantidad de ella que puede contener un limón, no llega ni a un gramo, así que imagina el impacto.

Para perder peso, debes quemar más calorías de las que consumes, bebas agua con limón o no. Y eso no significa comer menos de lo que comes. Implica comer más sano, hacer actividad física (con salir a caminar, me vale) y beber suficiente agua, ya sea con limón o sin limón (en la publicación del 13 de febrero —«De qué color es tu pipí»— te hablo de la hidratación y te doy alguna recomendación sobre la cantidad de agua que debes consumir cada día), entre otros.

Comparte esta publicación si crees que puede interesar a alguien de tu entorno.